miércoles, 27 de julio de 2016

El segundo martes en Quetzaltenango

                El comienzo del segundo martes aquí en la Casa Xelajú era normal como los otros días que habíamos tenido durante el viaje.  Nos levantamos a las 7 por la mañana y yo desayunaba yogur y pan mientras Moydie desayunaba cereal frío con leche y él tosía un poco.  Por la mañana, él se sintió mejor y yo esperaba que su enfermedad parara para siempre.  Me duché a las 7:10 y el agua calentó más rápido que los días anteriores.  Después de ducharme, me vestí con jeans y una camisa marrón y entonces me puse maquillaje y me saqué el pelo hasta que estaba seco.  A las 7:58, Moydie y yo nos bajamos de las escaleras para empezar las lecciones de español. 
Al principio de mi lección con Marlen, hablamos de San Simón por un rato y la brujería en una ciudad en Guatemala.  No me gustaba nada de la brujería y no pensaba que era una buena idea para jugar con el diablo así.  Además, hablamos de la historia de un presidente o sea un dictador de Guatemala.  La historia era muy interesante porque me mostró que todos gobiernos en cualquier país tienen corrupción y eventos curiosos que pasan sin explicación. 
Mientras yo estaba leyendo un artículo de este presidente, alguien tocó a la puerta.  Era mi esposo y me preguntó en inglés si yo quisiera ir a Bake Shop con él.  Lucia, Marlen y yo nos reímos mucho porque me preguntó en inglés, entonces, Moydie me preguntó en español.  Estaba muy orgullosa de él porque él trataba de hablar español y lo lograba.  Luego, a las 9:10, Marlen, Lucia, Moydie y yo fuimos a Bake Shop donde compramos nuégados con canela, un galón de leche y 4 tazas de yogur con sabores diferentes.  Marlen y Lucia compraron yogur también. 
Después de Bake Shop, caminamos por el mercado para que pudiéramos comprar pitallas, liche, mangos y bananos rojos.  Después de comprarlos, Moydie y yo seguimos a Marlen y Lucia que estaban buscando la mujer que vendaba empanadas ricas porque ella no estaba en su lugar típico.  No la encontramos, pero encontramos a otra mujer que estaba vendiendo las mismas empanadas.  Moydie y yo nunca las habíamos probado y por eso, pensé que necesitábamos probarlas, por lo tanto, compramos dos con Lucia y Marlen.  Luego, nos salimos del mercado y después de 10 minutos, llegamos a la Casa Xelajú donde Moydie tuvo un ataque de tos en el apartamento.  Fue una lástima porque me mostró que Moydie no estaba mejor. 
Llegamos a la Casa Xelajú a las 10:20 por lo tanto, Marlen, Lucia, Moydie y yo comimos las empanadas juntos y las empanadas me encantaron mucho porque estaban fritas con mucho sabor.  A las 10:30 sonó la campana para la pausa y entonces, nos quedamos en el jardín donde comimos las empanadas.  Después de un rato, Pedro nos acercó y hablamos con él hasta que viniera la chica nueva.  Ella vino a la escuela el lunes de esta semana y ya no la habíamos conocido.  La chica se llamaba Erin y era maestra de español en el estado de Michigan en los Estados Unidos.  Erin y yo hablamos de la enseñanza de español hasta que soñara la campana.  Caminamos despacio arriba de las escaleras porque estábamos hablando todavía, pero nos despedimos a la cima y fuimos a nuestras clases. 
Por la segunda mitad de mis lecciones, Marlen y yo practicamos todos los tiempos en español, revisamos mi ensayo de la noche anterior el cual no tuve errores excepto de cierto vocabulario porque yo no sabía como escribir algunas palabras y hablamos de temas sociales otra vez.  Entonces, antes de darme cuenta, Marlen me dio tarea y me fui a la 1 para reunirme con mi esposo.
A la 1:15, Moydie y yo empezamos a cocinar nuestro almuerzo.  Queríamos hacer salsa para las tostadas, pero después de tratar de encender la estufa, nos dio cuenta que no tuvimos gas para la estufa.  Por lo tanto, me bajé de las escaleras para pedir a Carlos.  Carlos era un gran hombre porque casi inmediatamente después de preguntarlo, tuvimos gas para nuestro almuerzo.  Así que cocinamos los tomates en un sartén hasta que pudiéramos quitarse las cáscaras.  Entonces, revolvimos los tomates con cebollas y cilantro porque olvidé la sal.  Moydie hizo guacamole de un aguacate y luego, comimos enchiladas. 
Después de almorzar, eran las 2:30 así que nos bajamos para reunirnos con Patty y Erin porque íbamos a Trama Textiles.  Trama Textiles es una asociación de mujeres que tejen para su trabajo.  Su lugar estaba cerca del parque central por lo tanto, sólo caminamos por 15 minutos hasta que llegamos allí.  Cuando entramos el edificio, vi a mucha gente mirando a una mujer que estaba tejiendo.  Me fascinaba mucho así que inmediatamente quería aprenderlo, pero antes de dar una explicación de tejer, tuvimos que mirar un video de la asociación el cual era bonito.  El video habló de la razón de la asociación la cual era una actividad que se untaba a las mujeres que perdieron sus padres y esposos en la guerra civil que terminó en 1996.  Además era una manera en que ellas podían recibir dinero para sus familias.  Después de mirar el video, miramos la presidenta y otra mujer tejiendo hasta que fuéramos a la tienda para comprar y apoyar esta asociación.  Moydie y yo ya compramos tejidos de otra mujer en la calle, pero en la tienda de Trama Textiles, encontramos un cerdito de peluche tejido y por supuesto, lo compramos y se llamaba “Cerdito”.  Después de comprarlo, salimos con Patty y Erin.  Llegamos al apartamento a las 4:30 y entonces, Moydie y yo descansamos. 




El resto de la noche, Moydie y yo hicimos tarea, comimos fruta y miramos la película Bourne Ultimatum hasta que nos acostáramos.                   


No hay comentarios:

Publicar un comentario